Ubicado en uno de los municipios de más alta marginación de México, este proyecto responde a la necesidad de la Asociación de Mujeres Indígenas Campesinas Xasastli Yoliztli de contar con un espacio en el que pudieran generar valor agregado a los productos existentes en la región como el chile serrano y las zarzamoras. La propuesta fue crear este centro de producción en el cual pudieran generar salsas gourmet para el consumidor final.
La pieza clave para el desarrollo de este proyecto fue la claridad de ideas de las clientes. Desde el inicio del proyecto querían un espacio que reflejara su personalidad como cooperativa, a la vez que se convirtiera en un polo de desarrollo y fuente de empleo en la región.