SOBRE EL AUTOR

Jessica Alcántara Rivera Coordinadora BIM-Investigación
Aranza Ayala Amador
Programa de Formación de Talento en Investigación

“Consideramos que los proyectos de vivienda social son de los más importantes para la población, ya que están dedicados a las personas menos favorecidas, el objetivo principal es lograr brindar un hogar digno.”

Problemáticas en proyectos de viviendas sociales

Los proyectos de vivienda social son de gran ayuda para todos los civiles con recursos limitados. Sin embargo, se sabe que estos proyectos regularmente son producciones en masa, estos procesos de construcción heredan la filosofía de la producción industrial en la que lo importante es construir una cadena de montaje o línea de producción para eficientar y optimizar recursos humanos, económicos, materiales y temporales. Uno de los primeros casos conocidos de producción de la vivienda en masa surge durante la Primera Guerra Mundial con la “Cabaña Nissen”, diseñada por el ingeniero e inventor canadiense-británico nacido en Estados Unidos, el mayor Peter Norman Nissen. Con la guerra, se construyeron más de 100,000 de ellas en Gran Bretaña, que adicionalmente inspirarían diseños similares. Y llevaron a la especialización en las tareas de construcción en serie.

Tropas británicas en el proceso de construcción de chozas Nissen durante la Batalla del Somme, Cerca de Bazentin (Noviembre del 1916)

Actualmente, la producción en masa de viviendas sociales sigue siendo la solución para dotar de una vivienda a las poblaciones que requieren de una vivienda digna. Los problemas principales en el caso de México y Latinoamérica vienen como consecuencia de la calidad constructiva de las viviendas, así como los esquemas de distribución interior, mismos que se transforman en problemas cotidianos de los futuros habitantes de la vivienda.

Las habitaciones de estas viviendas, por lo general no cuentan con espacios suficientes, y suelen ser de mala calidad, además de los materiales de construcción, la falta de los estudios para asegurar el confort térmico, lumínico y acústico dentro de la vivienda, promueven las enfermedades en los habitantes, la falta de espacios relevantes para las viviendas, tales como lo son los patios, jardines y estudios afectan recurrentemente y de igual forma a la salud de los usuarios. Hay que tener presente que el confort no debe ser exclusivo para los segmentos de vivienda residencial alta, debe aplicar a la vivienda en general independientemente de su costo.

¿Por qué surgen estas problemáticas?

Podríamos decir que las deficiencias dentro de las viviendas se deben a un descuido de las instituciones, o a negligencia, o incluso a la corrupción dentro de la construcción, pero todas son suposiciones.

La realidad es una consecuencia en cadena de un diseño y construcción deficiente, seguido de la construcción en masa; la producción en grandes cantidades de vivienda vuelve complejo el seguimiento y supervisión de cada caso particular, difícilmente se puede estar al pendiente al 100% para asegurar que las construcciones sean perfectas. Es decir, que nos encontramos frente a un problema de calidad en la construcción, que puede ir desde la orientación errónea de los productos habitacionales, mala elección del sitio, hasta la elección incorrecta de los materiales y posteriormente, una mala ejecución y supervisión de los procesos constructivos en sitio.

¿Qué se recomienda para reducir estos errores al mínimo?

Todos sabemos que no se puede generar un proyecto perfecto, la mejora continua es algo que caracteriza al sector de la construcción, pero, ¿cómo podemos evitar los errores? Es extremadamente complejo y tardado realizar estudios de forma física en cada uno de los prototipos de vivienda.

Para poder solucionar, o reducir estas problemáticas, es importante una buena comunicación entre los involucrados, y, sobre todo, una muy buena organización, ¿de qué manera podemos conseguirlo? La respuesta es la Metodología “Building Information Modeling” (BIM), o su traducción en español “Modelado de la Información de la Construcción” (MIC).

Implementación de la Metodología BIM en los proyectos de vivienda social para asegurar la calidad en la ejecución, supervisión y confort de cada vivienda

Supervisión de la ejecución y calidad
constructiva de proyectos con BIM

Información coordinada de las especialidades
involucradas en un proyecto con BIM

La organización, disciplina y comunicación son factores fundamentales para la realización de cualquier proyecto, estos conceptos mantienen el orden, y ayudan a lograr la estabilidad del equipo de trabajo, pero cuando no se conocen los medios, es muy complicado conseguir los objetivos.

Con la Metodología BIM es más sencillo lograr una comunicación interdisciplinaria, gracias a que el uso de distintas plataformas y procesos mejoran la colaboración y la coordinación del equipo durante el proceso del proyecto, los flujos de trabajo son más eficientes, las visualizaciones en 3D que se generan son más precisas, así como el seguimiento a los procesos constructivos. Además, esta metodología maneja distintas aplicaciones en donde existen herramientas que nos ayudan a hacer estudios preliminares solares, de iluminación, e incluso de ventilación natural. También existen procesos que abonan y apoyan a los procesos de supervisión a través de la realidad virtual y la realidad aumentada.

Con las herramientas que integran la metodología BIM aplicadas en los proyectos de vivienda social se facilitará conseguir los objetivos que se esperan del proyecto, y reducir los defectos que se presentan en las entregas subsecuentes.

Conclusión

Los proyectos de vivienda social al paso del tiempo han presentado problemas de calidad, los responsables de estos proyectos siguen repitiendo estos patrones, ya sea por falta de recursos o de conocimiento, sobre todo debido a la deficiencia en la implementación de procesos eficientes. La implementación de la metodología BIM permitirá acercarnos a los objetivos de calidad, implementando acciones desde el proceso de diseño, hasta el seguimiento post venta, mejorando el rendimiento y la productividad de los equipos de trabajo, pero, sobre todo, la habitabilidad, el bienestar, y la satisfacción de los habitantes, en la vivienda social.

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